Selección de críticas del musicólogo Gustavo Moral Álvarez

miércoles, mayo 21, 2003

“Bruno Martínez en el Conservatorio”

El Conservatorio de Música Jesús de Monasterio puso fin el pasado martes a su ciclo de conciertos “+ Que Clásica” con un recital en el que intervino el pianista Pablo López Callejo y los clarinetistas Javier Defez Requena –profesor del centro organizador- y el solista de la ópera de París, Bruno Martínez.

En la jornada precedente se había organizado una Clase Magistral con el clarinetista francés que se no pudo verse mejor completada que con el concierto que pudimos presenciar en el salón de actos del propio conservatorio. El programa elegido ofertó a la audiencia variedad de estilos en las piezas escogidas, pudiendo escuchar desde romanzas de Schumann hasta las infrecuentes ‘Domaines’ de Pierre Boulez –jamás escuchadas en los últimos tiempos en nuestros escenarios-.

Bruno Martínez es un gran intérprete y lo demostró en todas las obras, tanto con el clarinete como con el poco habitual ‘corno di bassetto’, entablando perfecto diálogo en las piezas a dúo con Javier Defez. La agilidad exigida a este instrumento de viento permitió, en manos expertas, un discurso fluido en el que los pasajes virtuosos se compaginaron con los más expresivos sin menoscabo de la calidad en ninguno de ellos. En la obra de Boluez, además, pudimos escuchar –en una puesta en escena en constante tránsito- variedad de tímbricas y efectos sonoros de compleja ejecución pero espectacular resultado.

Por su parte Pablo López Callejo demostró eficacia en su trabajo de acompañante, permitiendo el lucimiento de los solistas sin olvidar la coherencia en su instrumento.

Tal vez quedaron algo deslucidas las obras de Piazzolla y Guastavino, perfectamente interpretadas pero un punto vacías de la emoción y gracia siempre exigible en obras procedentes de danzas populares o en la espléndida partitura de Piazzolla –indudablemente una de las melodías más bellas y emotivas jamás escritas-.

El público disfrutó con el concierto y, lo que es más interesante, estuvo compuesto por estudiantes del Conservatorio que, de esta forma, comienzan a ser el público del futuro o, lo que sería más deseable, ya del presente.